Trabajar desde casa – las recomendaciones de teletrabajo más importantes
El teletrabajo o teletrabajar cada vez es una opción (u obligación) cada vez más habitual. Es rentable, económica, e incluso más justa. Pero… se hace tremendamente complicado. Desorganización, más estrés, más horas de trabajo, e incluso malos hábitos para comer y dormir. En este artículo no vas a encontrar solo recomendaciones para el teletrabajo, sino 7 claves psicológicas para que a partir de ahora te merezca más la pena.
Porque no hemos nacido sabiendo, sino que nos adaptamos a los contextos. Desde la infancia nos hemos acostumbrado a funcionar según estructuras claras (el colegio, luego instituto, universidad y finalmente una estructura laboral).
Cuando carecemos de esa estructura todo se hace más difícil. Por este motivo muchas personas quieren teletrabajar para sentirse más libres y rendir mejor, pero luego se encuentran con una realidad más complicada.
¿Qué es lo que lo pone todo tan difícil? Ante todo son nuestros propios patrones… y eso es lo que debe cambiar.
La forma no es con sofisticados softwares o agendas mágicas, sino con cambios psicológicos clave que te hagan producir de forma más armónica y te den más tiempo para ti.
Lo que voy a contarte en este artículo se deriva de mi experiencia como psicólogo y coach acompañando a personas en sus procesos de cambio personal. En muchos de esos procesos las personas buscaban mejorar su bienestar en el trabajo, más aún si estaban teletrabajando. Si es tu caso… vamos a por ello.
Por qué el teletrabajo resulta tan complicado
Trabajar desde casa puede darte autonomía, ganas libertad, puedes tener la oportunidad de aumentar tu tiempo libre y generar más ingresos (si consigues dar con la fórmula adecuada), e incluso poder estar con tus hijos o familia según una crianza más natural y acorde a las necesidades de los seres humanos.
Pero… no es oro todo lo que reluce, y por muchas que sean las ventajas, al final terminas trabajando en pijama, desayunando mal, pasando muchas más horas trabajando desde casa que en la oficina, con mala organización, pérdidas de tiempo, sales poco, se reduce tu vida social, los resultados no son del todo buenos, consigues mucho menos porque estás solo o sola… ¿sigo o ya sabes a qué me refiero?
Factores psicológicos que nos perjudican para el teletrabajo
Los seres humanos necesitamos rutinas para funcionar. Si tu forma de vivir, relacionarte, producir y trabajar depende de una estructura previa relacionado con horarios, inicios y fin, etc., el teletrabajo se transforma en todo un reto.
A su vez, depender tanto de esa estructura externa (que nos da el trabajo presencial) nos dificulta organizarnos de forma productiva. La forma en la que te comunicas y gestionas tus emociones (estrés, agobio, inseguridad) también es clave.
Las recomendaciones para el teletrabajo deben comenzar desde nuestro propio cambio personal, tanto de rutinas como de gestión del tiempo y emociones.
No podemos controlar el mundo ni cambiar lo que ocurre… pero sí puedes aprender a producir de otra forma para conseguir más y mejores resultados en menos tiempo y con menos esfuerzo. ¿Cómo? Gracias al desarrollo de habilidades personales. Te doy las 7 claves.
7 claves psicológicas o recomendaciones para el trabajo
Desde que somos niños nos han enseñado a permanecer 8 horas en la oficina. Toda nuestra educación, hábitos y experiencias, están relacionadas con el trabajo continuado, con los horarios, con los sistemas jerárquicos. Nadie nos ha enseñado nunca a trabajar por cuenta propia y con sistemas de relación horizontales. Pero eso puede cambiar… si cambias tú.
Estas 7 claves o recomendaciones para el teletrabajo en realidad son cambios psicológicos y emocionales que también te ayudarán a sentirte mejor contigo y mejorarán otros aspectos de tu vida. Te dejo antes un vídeo sobre productividad que quizá te ayude.
Tiempos máximos
Los datos sobre el trabajo en casa nos dice que las personas trabajan muchas más horas desde casa que en la oficina. La falta de horarios y orden te lleva a trabajar más en lugar de menos, y eso es una falta de eficacia. ¿El problema? Que estamos acostumbrados a trabajar según tiempos mínimos.+
Desde niños nos dijeron: «tienes que estudiar 3 horas como mínimo». Eso nos llevaba a esperar a que esas horas pasaran con independencia del resultado. El cambio consiste en trabajar con tiempos máximos. Es decir: «tengo como máximo X tiempo para cumplir este objetivo». Si lo cumples, genial; y si no… a cambiar de objetivo.
Este cambio de estrategia de ayudará a estará más enfocado, a mejorar tu rendimiento y a potenciar tu concentración y resultados. Con el tiempo, conseguirás necesitar menos tiempo para conseguir los mismos objetivos.
Priorizar
Si priorizas el trabajo, te pasarás el tiempo trabajando. Prioriza antes tu vida personal (aunque durante toda tu vida te hayan dicho que hagas lo contrario), y cuando todo esté en orden, en bienestar, y hayas cumplido con tus necesidades básicas, tendrás más energía para enfocarte en tus objetivos profesionales.
Parece una locura que te diga esto… pero todo lo diferente nos suele parecer una locura al principio. Conseguirás más motivación, más enfoque, más responsabilidad, y ante todo, sentirás que tienes vida personal.
Agendar para estructurar
Ya no existen horarios de oficina, así que agéndalo todo. Desde la primera hora de la mañana agenda cada hora, cada 30 minutos si es necesario, en objetivos totalmente concretos y factibles. Trata de que tu agenda termine pronto para poder disfrutar de un día completo. Puedes comenzar con algo más básico y asumible y con el tiempo ir aumentando la calidad de tu agenda. Sobre todo, sé impecable con tus objetivos.
Asertividad
La comunicación asertiva suele definirse como la capacidad para decir no, pero es mucho más que eso. Es la comunicación que te pone en contacto contigo y con los demás.
Se trata de decir siempre lo que realmente piensas y sientes, establecer límites concretos entre lo que puedes hacer y lo que no, siempre con cordialidad y respetando el espacio del otro. Las personas que trabajan desde casa con éxito suelen decir no casi el 90% del tiempo. Escoge los proyectos adecuados y factibles y concéntrate en ellos. No temas rechazar algo que en realidad solo va a hacerte perder el tiempo.
Gestión de emociones
Esta es una de las recomendaciones para el teletrabajo más personal e importante. Durante cada segundo del día sientes algún tipo de emoción. Si tus emociones están mal gestionadas, te dejarás llevar por un miedo disfuncional, un orgullo limitante, una pereza que te lleve a la procrastinación.
Ten las emociones de tu lado gestionando tu mundo emocional de forma funcional, o como solemos decir, aumentando tu nivel de Inteligencia Emocional. Pero no leas libros ni sigas tips… vive un auténtico proceso de cambio y aprendizaje para tener a las emociones de tu lado.
Eficaz sí, pero ante todo eficiente
El tiempo es oro y tus recursos también lo son. Ser eficaz es conseguir tus objetivos, y ser eficiente es conseguirlos con la menor cantidad de recursos posibles. Utiliza el tiempo para lo importante, utiliza le menor cantidad de recursos posibles, adáptate a tu realidad, respétala y trabaja con lo que realmente puedes hacer. La comunicación asertiva y tu compromiso con tu agenda y prioridades es clave para conseguirlo.
Vínculos personales: no los olvides
Casi ningún trabajo funciona bien en soledad, sea desde casa o no. Necesitas gente, bien para trabajar, para colaborar, como apoyo, como un recurso externo o sencillamente para olvidarte del trabajo un rato. La gente es importante y debe rodearte. Busca los momentos para la vida amistosa, social, para colaborar, aprender y crecer de los demás y con los demás.
El cambio necesario (recomendaciones para el teletrabajo)
Conseguir estos cambios puede ser más difícil en la práctica. No son solo recomendaciones para el teletrabajo sino vivir un cambio más profundo que te ayude en el resto de áreas de tu vida.
Este es el motivo por el cual es tan valioso contar con ayuda especializada y sobre todo constante. Por este motivo mi trabajo como psicólogo y coach no es con sesiones esporádicas, sino con una mayor constancia (cada día, para cualquier consulta que tengas), además de con sesiones y otras herramientas.
Si es lo que quieres, no dudes en agendar una sesión para conocernos y damos el paso. Te envío muchos ánimos.
Gracias por pensar en ti,
Rubén