Relaciones con narcisistas: ¿qué hay de cierto? ¿Realidad o mito?

Relaciones con narcisistas: ¿realidad o mito creado por las redes?

Hoy día es un tema muy habitual en redes sociales: personas narcisistas, relaciones con narcisistas, qué hacer si estás con un narcisista o cómo recuperarte del abuso narcisista… Cada día nos bombardean con contenidos de este tipo. Pero, ¿se basan en evidencias o es un mito?

El trastorno de personalidad narcisista existe y es cierto que las dificultades psicológicas y emocionales de las personas con este trastorno les afectan tanto a ellas como a las personas con las que se relacionan. Sin embargo, lo que hoy día cuentan las redes (a través de cientos o miles de contenidos) no es veraz… ¿Por qué ocurre esto?

En los últimos años me he encontrado con un problema frecuente en consulta. Personas a las que acompañaba en sus procesos de cambio o terapia o que pedían una primera consulta me hacían estas preguntas: ¿soy una persona narcisista? ¿Mi pareja es narcisista? En muchos casos eran personas que habían sido acusadas de narcisistas o creían tener relaciones con narcisistas, lo cual les hacía sentir angustia, dudas y mucha ansiedad.

Encontrar claridad en este mundo de sobre información en redes sociales es complicado. A su vez, son cada vez más profesionales de la Psicología que publican este tipo de contenidos para ganar notoriedad y que así sus artículos se compartan.

El objetivo de este artículo es que encuentres esa claridad. Vamos a definir de forma sencilla qué es realmente el narcisismo y dónde están los límites entre realidad y ficción. Todo lo que voy a contarte está basado en evidencias y también en mi experiencia como psicólogo y coach tras casi 15 años acompañando a personas en terapia. Vamos a por ello.

El significado del verdadero narcisismo

Intenta hacer un ejercicio de memoria: ¿hace apenas unos 15 años pronunciabas la palabra «tóxico» para algo? Seguramente solo al hablar de un producto de limpieza.

Hoy día vivimos en la era de la sobre información. Las redes funcionan según algoritmos e intereses, que popularizan solo lo llamativo. Esto siempre ha ocurrido: «la verdad se está poniendo los zapatos mientras la mentira ya dio dos vueltas al circuito».

Esta problemática actual hace que lo que se publica en redes está destinado a llamar tu atención y finalmente condiciona tu forma de pensar y ver lo que te ocurre. Esto es todo lo contrario a lo que debe hacer la Psicología o lo que debe suponer una terapia o proceso de cambio.

Un cambio auténtico y profundo para que vivas con más bienestar y mejoren tus relaciones pasa siempre por conocerte, descubrir cómo gestionas lo que sientes y aumentar el punto de vista. Este tipo de contenidos cerrados (cómo son las personas tóxicas, cómo son los narcisistas, recuperarte de relaciones con narcisistas, etc.) solo nos encierran y perjudican.

¿Qué es realmente el narcisimo?

Se trata de un trastorno psicótico de la personalidad y muy difícil de diagnosticar. ¿Por qué? Porque el primer síntoma de una persona con un trastorno de personalidad narcisista es su incapacidad para reconocer el problema (algo habitual en los trastornos psicóticos).

Sin embargo, en un periódico muy popular podemos leer que un famoso psiquiatra dijo que una persona narcisista siempre se sentiría orgullosa y engreída de serlo… Esto es totalmente incierto y carece de evidencia alguna.

Un trastorno de la personalidad narcisista consiste en una forma disfuncional y psicótica de construir autoestima. La persona con este trastorno, de forma interna, se siente frágil e insegura, de tal forma que necesita relaciones que validen su valía y les generen seguridad. A su vez, estas personas tienen serias dificultades para vivir con estabilidad emocional o laboral.

Características de las personas narcisistas

Entre esos contenidos (son incontables), a veces las personas hablan sobre el narcisismo apoyándose en lo que dice el DSM (el manual de psicodiagnóstico). Sin embargo, sin ser un profesional cualificado no podemos entender qué quieren decir estas categorías exactamente, así como no entender la relevancia de palabras como «psicótico» o «ideaciones».

Explicado de forma más sencilla, estas serían las características fundamentales de una persona con el trastorno de personalidad narcisista.

Su forma de construir autoestima es irrealista: creen ser capaces de todo (aunque la realidad les demuestre lo contrario), no aceptan crítica, o pueden padecer ideaciones o delirios psicóticos. Estas características hace que les resulte difícil encontrar estabilidad profesional o que se sientan cómodas con las personas.

A su vez, viven un mundo subjetivo del cual no pueden salir. Su interpretación de la realidad suele ser rígida, irrealista e incluso irresponsable, ya que no conectan con una realidad más objetiva. Esto también les hace sentir más inseguridad e incapacidad, motivo por el cual critican al mundo, dependen mucho de sus relaciones y que les halaguen, etc.

Esta realidad está muy lejos de ese dibujo de la persona narcisista como alguien engreído que manipula a los demás. Además, esta definición es muy general y pudiera aplicarse a cualquier persona. Esto funciona de la misma forma que la Astrología o las lecturas de futuro… se trata de un sistema de sugestión para captar tu atención y sentir que la persona con la que tienes dificultades es narcisista. De esta forma, esos contenidos se transformarán en más populares.

El gran mito sobre el narcisismo y las relaciones con narcisistas

Este trastorno es en realidad un problema muy poco diagnosticado, que se da ante todo ante infancias desestructuradas y donde el ambiente familiar era de tipo psicótico, y que no se da en tanta población como esos contenidos afirman. A su vez, como hablamos, utilizan características muy generales para que nos sintamos identificados.

Hablar de relaciones con narcisistas nos llama mucho la atención, ya que todo ser humano vive relaciones de pareja y experimenta dificultades.

Que esto lo hagan ciertos medios de comunicación para conseguir millones de visitas puede ser comprensible. Que también lo hagan perfiles desde el intrusismo, también puede ser entendible. Sin embargo, ¿por qué cada vez más páginas de Psicología o profesionales de la Psicología afirman lo mismo desde las redes?

Las psicotrolas del narcisismo: por qué te mienten en cada contenido

En el último año he recibido hasta tres consultas de personas a las que acompañé en sus procesos de cambio y terapia hace años. Lo que ocurría era lo siguiente: estas personas se sentían mal porque creían que era narcisistas ya que sus parejas o alguien más se lo había insinuado. ¿En qué se basaban? En leer características superficiales y generales en alguno de esos contenidos de redes sociales.

Esta tendencia ha hecho que las personas que cada vez estén más confundidas, tienen dificultades con la autoestima y no trabajan sus relaciones con profundidad. La situación hoy día es tan alarmente, que decidí resumir todo ese contenido en «Psicotrolas: las mentiras psicológicas de nuestro mundo digital».

En este libro profundizamos en qué son las psicotrolas, cómo funcionan las redes para popularizar estos contenidos, cómo te afectan, y también veremos conceptos muy actuales que nos confunden: personas tóxicas, relaciones con narcisistas, ghosting, gaslightning, PAS o personas altamente sensibles, etc.

Te dejo un tráiler del libro de solo 1 minuto.

Toda la información la encontrarás en esta página (haz clic).

Un problema actual: seguir tendencias, no evidencias

Nuestro mundo digital, entonces, nos desinforma cada vez más. Toman contenidos o palabras que resultan llamativas y las transforman en generalidades para llamar nuestra atención. Los medios, a su vez, utilizan los contenidos que ya se han popularizado en redes para aumentar así aún más la confusión.

Estas ideas condicionan nuestra forma de vernos y de ver al otro, de tal forma que nos enfocamos en lo que hace el otro o en categorizarlo en lugar de en nuestro propio aprendizaje personal, cambio y autoconocimiento, como si se tratara de una forma de anti terapia.

¿Cómo hemos llegado a esta situación?

Cómo funcionan las psicotrolas

Estas psicotrolas sobre el narcisismo funcionan de la siguiente manera: se crean contenidos tendenciosos, y una vez se hacen populares, se crean más contenidos tratando de apoyarse en esa popularidad. Cuando pasa el tiempo y esa popularidad se agota, se crean otros conceptos.

Sin embargo, el narcisismo parece una idea bastante estable. ¿Por qué? Porque es totalmente cierto que vivimos cada vez más dificultades en nuestras relaciones, tenemos problemas para poner límites, existen manipulaciones y coacciones. Las relaciones, que deben ser un fuente de bienestar, parecen haberse transformado en un cúmulo de problemas.

No obstante, la solución no es categorizar al otro, como hablamos, sino un aprendizaje personal. ¿Cómo enfocas tus relaciones? ¿Cómo gestionas lo que sientes? ¿Te comunicas de forma asertiva? Si el otro te manipula o coacciona (algo que puede hacer cualquier persona sin tener un diagnóstico de trastorno de personalidad narcisista), ¿cómo reaccionas ante ello?

Las soluciones están siempre en uno mismo, no en poner categorías al otro, lo cual reduce nuestra visión sobre las relaciones.

Cómo salir de este problema

Existen dos soluciones fundamentales. La primera es tener pensamiento crítico. No te creas todo lo que leas en redes o lo asumas como una verdad. La segunda consiste en tratar de reducir la adicción tecnológica, que también nos lleva una y otra vez a esos contenidos (y sus autores lo aprovechan). Aquí te dejo un artículo sobre la relación entre ansiedad y adicción tecnológica.

Este es el motivo por el cual cada vez hay más páginas de Psicología que siguen estas tendencias. Lo hacen para destacar en esta selva que es internet, con independencia de si los criterios son superficiales o incluso perjudiciales. Este problema debe quedar en la ética de cada profesional. Si las personas cuentan con pensamiento crítico, esto no debe ser un problema.

Relaciones con narcisistas: realidades

El narcisismo es entonces un trastorno mental grave que se da en casos muy concretos y que dificulta la estabilidad de la persona, no un conjunto de características generales y superficiales. Un relación con alguien con este trastorno nos afecta, pero no es tan común como hablan esos contenidos.

Lo que sí es común es tener dificultades con nuestras relaciones. El miedo, las inseguridades, la culpa, la ira o discusiones son cada vez más frecuentes.

La solución, como hablamos, está siempre en un cambio y aprendizaje personal, para que tu bienestar dependa principalmente de ti y así hacer que tus relaciones funcionen mejor. Tener la capacidad para comunicarte de forma asertiva y así no vivir una relación que realmente no quieres es también un aprendizaje necesario.

Un cambio profundo y certero

En este artículo, además de desmontar esos mitos, hemos mencionado muchos de los aprendizajes necesarios para que puedas solucionar el problema que tienes en tus relaciones.

Pudiéramos resumirlos en estos:

• Construir una autoestima funcional: para que tu bienestar dependa principalmente de ti y así no tengas tanto enfoque en el otro
• Gestión de emociones: para que el miedo o la inseguridad no te condicionen tanto, sino que vivas y te relaciones con más aceptación, seguridad y confianza
• Asertividad: aprender a comunicarte de forma asertiva y poner límites te ayudará a que tus relaciones sean sanas. Las manipulaciones o coacciones pueden venir por parte de cualquier persona y para esto no necesita «ser narcisista». Ver al otro no te ayuda. Saber poner tus límites, sí.

Todas las personas que me han consultado sobre si eran narcisistas en los últimos años, no lo eran. No reunían características para pensar en un diagnóstico. Sin embargo, las psicotrolas nos confunden y hacen mucho más daño que todas esas llamadas personas narcisistas.

Te envío muchos ánimos, paciencia y sobre todo autoconocimiento y pensamiento crítico.

Recuerda que en Psicotrolas vamos a profundizar mucho más, y cualquier necesidad que tengas… como sabes, puedes escribirme o agendar una primera sesión.

Gracias por pensar en ti,
Rubén